Todas las personas tienen amigos en quien confiar. Nadie está solo. Tienes una familia, amigos o alguien que te proteja. Debes disfrutar a cada persona porque no sabes qué le va a pasar en un futuro.
Uno siempre debe estar consiente de que pueden pasarle cosas malas a alguien cercano a ti o a ti mismo, pero NO debes perder la esperanza.
"No importa que tan lejos estés de alguien querido porque si en verdad se quieren jamas se van ha olvidar..."
Uno debe aprender las cosas positivas de los amigos y familiares. Si alguien se va no sólo pasan cosas negativas, también positivas; sólo hay que buscarlas. Aunque uno prefiera que no se haya ido esa persona, debes sacar las cosas buenas, no sólo negar. Eso no quiere decir que no lo extrañes y no quiere decir que prefieras que este muerto, pero se trata de sacar lo positivo.
Cuando alguien se va al cielo debes pensar que aunque está lejos, está en este universo, en este mundo.
Si alguien se muere no debes pensar que se murió, sino que se transformó. Por ejemplo:
- Del cuerpo a un espíritu
- De un cascaróen nació el verdadero cuerpo
- De un capullo sale la luz de su espíritu
Si se muere (transforma) alguien, mucha gente va al panteón muy seguido porque piensa que la persona está ahí pero es FALSO. La persona está en una forma diferente (espiritual) en el cielo, en tu casa, junto a ti. En realidad en el panteón está un monumento hacia esa persona; NO ESA PERSONA.
Esto que yo hice relata el ciclo espiritual de la vida:
Se puede decir que se trabaja en toda la vida y al final (cuando uno muere) gana su premio: empezar a vivir la verdadera vida. Hay gente que tarda un poco más pero todos lo ganan.
¡NO hay que ser egoistas, hay que dejar que la persona descanse!
Estoy totalmente de acuerdo contigo. La muerte de un ser querido nos produce tristeza porque ya no está con nosotros de la manera en que estábamos acostumbrados. Pero como amamos a esa persona, en realidad nunca nos deja. O sea, no muere : )
ResponderEliminarL. V.
Muchas gracias por compartirnos estos bellos y profundos pensamientos.
ResponderEliminarMe gustó mucho la distinción entre la tumba del cementario y la vida espiritual que nos acompaña a todos lados.
Con tus reflexiones me siento más cercano a Luis Antonio y menos triste.
Gracias.
LILGM
Mi querido Juan Ma:
ResponderEliminarPor supuesto que extrañamos a nuestro inolvidable Toto, pero efectivamente ya se nos adelantó en espíritu y eso lo hace estar muy cerca de Dios como ángel,como santo, como amigo, como intercesor.
Te comento que se me perdieron unos papeles muy importantes el viernes por la mañana en Walt-mart se me resbalaron y los tiré sin darme cuenta, los busqué durante una hora y no los encontré, pedí a todos nuestros seres queridos que hoy en día ya no están con nosotros en cuerpo, pero si en espíritu y que por supuesto nos cuidan, que me ayudaran a encontrarlos, aparecieron, para el medio día los entregaron en servicio al cliente.
Estamos contigo, con tus papás y llevamos siempre en nuestro corazón a Toto, afortunado de estar con Dios y toda la corte celestial.
Te quiero, Marcela.
Juan
ResponderEliminarEste ensayo demuestra la parte valiosa que puede rescatarse de una pérdida; quienes hemos perdido alguien cercano nos quedamos con sensaciones difíciles y a veces de manera egoísta nos centramos en el hueco que dejo esta pérdida. Es verdaderamente maravilloso que rescates y compartas estos profundos pensamientos que hacen la existencia de tu ser querido ausente aún mas valiosa, porque demuestra que a través de él has aprendido de la vida y has crecido como ser humano.
Gracias por compartir esto que es tan tuyo.